¿Sabías que como padre o madre de un joven con autismo tú también necesitas apoyo? No únicamente tu hijo.
Hoy vengo a hablarte de un tema muy importante y que es necesario que pongas mucho cuidado y atención, ya que puede afectar o está afectando tu vida en las distintas áreas en las que te desarrollas (trabajo, pareja, salud, familia, desarrollo personal), si bien existe el síndrome del cuidador cansado, del cual hablaré en otro Blog, es necesario atender a los síntomas que ahora estas presentando como padre o madre.
- Cansancio extremo
- Ansiedad
- Estados depresivos
- Insomnio
- Asilamiento social
- Estrés
Estos son los síntomas más comunes que puede presentar una madre de un joven con autismo y esto se da principalmente por el miedo al futuro al saber que talvez tu hijo no está lo suficientemente preparado para quedarse solo y saber hacerle frente a la vida. Esta ansiedad que te genera el pensar que va a pasar si tu no estas, y quien se va a hacer cargo de él y sus necesidades.
Seguramente tiende a aislarte ya que sientes que no eres comprendida ni siquiera por tu familia, en ocasiones llega a romperse la relación de pareja quedándote sola, sin nadie a quien contar tus problemas llegando a experimentar estados depresivos, con insomnio, lo que hace que cada vez tu vida en lugar de ser gratificante y feliz se empiece a convertir en una situación que ni tu misma quieres experimentar o quieres salir corriendo de ahí.
De aquí que es muy importante que tu como persona y como madre te des un espacio para sanar, descargar y crecer como madre y cuidadora, pero sin olvidar que eres persona, que tienes metas, objetivos, y una vida que necesitas compartirla con tu hijo.
Que la mayoría de madres como tú sientan esto no quiere decir que este bien, busca apoyo, busca aprender que hacer con las crisis que se presentan en la relación con tu hijo, y si las cosas andan bien, recuerda que siempre se puede mejorar.
El trabajo en ti como persona ayuda mucho a que el trabajo de cuidadora mejore, ya que nadie puede ayudar a otro si no está bien, no olvides que primero tienes que estar tu bien para poder ayudar a otros, y esto no aplica solo al autismo si no a otras áreas de la vida donde es importante primero estar bien tú y de ahí ver por los otros.
No te dejes ganar por las inseguridades y miedos ni te enfoques únicamente en las terapias y atención que necesita tu hijo, recuerda que tu como madre debes saber qué hacer, como hacerlo y cuando hacerlo para potenciar y ayudar a tu hijo a que llegue a conseguir una vida autónoma y autosuficiente.
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